Fernanda: paciente recuperada de cáncer de pulmón

Mi nombre es Fernanda, y les quería contar mi camino hacia la sanación.

Toda la vida amé bailar música brasilera. Y fue justamente bailando este ritmo que me di la oportunidad de escuchar mi cuerpo. Mientras bailaba, noté que algo no estaba bien. Sentí tos seca y dificultad para respirar. Por eso, sin dudarlo, decidí visitar a un médico. En mis primeras consultas descartaron algo grave. Pero sin estar convencida del diagnóstico, decidí buscar una segunda opinión en el Hospital Alemán, donde siempre me sentí acompañada.

Me atendió la neumonóloga María Eugenia Alais, quien detectó una anomalía, lo que derivó en una intervención quirúrgica en el Hospital. Luego, para mi sorpresa, me diagnosticaron Cáncer de Pulmón.

La doctora me aconsejó que debía operarme cuanto antes para que el cuadro no empeore. Y ese mismo día, luego de 22 años de fumar todos los días, dejé el cigarrillo para siempre.

Cuando entré al quirófano, sabía que debía hacerlo con actitud plena y positiva. Y a pesar de mis temores, en el momento previo a la operación, bailé una coreografía de mis clases de danza.

Me llené de energía, y entré decidida a superar el momento más difícil de mi vida. La operación fue un éxito y, afortunadamente, como el cáncer había sido detectado de forma precoz, no necesité tratamiento posterior.

De la cirugía me quedó una cicatriz con forma de “U” en mi espalda. Al principio, no quería que nadie la viera. La ocultaba de todos. Hasta de mí misma.

Pasados los días y de forma gradual, la empecé a aceptar, a querer, y me di cuenta que esta marca tenía la forma de una «gran sonrisa».

Hoy, comprendo que esta marca no es sólo mía, sino que es de todos mis seres queridos. Es del Hospital Alemán y su equipo que tanto me ha ayudado. Y es de todas las personas que dejaron de fumar a partir de conocer mi testimonio en la “Fundación Pacientes Cáncer Pulmón”.

Y lo más importante, la marca que tengo en la espalda es el símbolo que me recuerda que más allá de las dificultades que se presenten, nunca debemos perder la sonrisa.