noviembre 2020

¿Cómo proteger tu piel del Sol?

 

La Dra. Virginia Gonzalez, especialista en Onco-Dermatología de nuestro Hospital, nos cuenta qué debemos saber al momento de exponernos al Sol para minimizar el riesgo de contraer cáncer de piel (la forma más frecuente de cáncer tanto en el hombre y la mujer), y que continúa en aumento año a año.

¿A qué debemos estar atentos?
Los rayos ultravioletas (RUV) producen cambios acumulativos y progresivos en nuestra piel. Los RUV provienen fundamentalmente del Sol, pero también de fuentes artificiales como las “camas solares”.

El Sol emite dos tipos de rayos ultravioletas, ambos perjudiciales para nuestra piel: los UVB y los UVA. Los UVB son más intensos entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, horario en el cual recomendamos que la gente no se exponga al Sol, ni siquiera con protector

¿Cómo proteger tu piel del Sol?

Por otra parte, los UVA son altos durante todo el día, incluso a las 8 de la mañana o a las 6 de la tarde. Es importante destacar que estos rayos son nocivos durante todo el año y que atraviesan vidrios. Por ejemplo, si pasás mucho tiempo detrás de un ventanal o manejando un vehículo, también debés utilizar protector solar.


¿Cómo podemos protegernos sin privarnos de disfrutar el verano?
Lo más importante es usar protectores solares de amplio espectro, lo que significa que tienen cobertura para ambos tipos de rayos ultravioleta. Esto debe estar explicitado en la etiqueta del producto.

Siempre, ante cualquier inquietud puntual sobre qué marca, presentación o factor utilizar, debe consultarse a un profesional de la salud ya que no todos los protectores tienen igual composición y cosmética.

A continuación, la Dra. González destaca las principales recomendaciones para la utilización de los protectores solares:

  • El factor del protector solar (FPS) debe ser idealmente igual o mayor a 50. Se recomienda usar el mismo factor para todo el cuerpo. Si presenta otros problemas cutáneos previos, debe consultar con un Dermatólogo acerca de qué factor usar y si es conveniente exponernos a pesar de utilizar el factor más alto.
  • La aplicación del protector solar debe realizarse 30 minutos antes de exponernos al Sol y sobre todo el cuerpo (para un adulto sería el equivalente a un pocillo de café). Es común olvidarse de poner protector en las orejas, el dorso de las manos, el dorso de los pies y el cuello, por lo que es importante recordar que todas las partes del cuerpo son afectadas de igual forma.
  • Se debe aplicar protector cada 2hs, luego de transpirar mucho o ir al agua.
  • No hay que reducir el factor del protector solar a lo largo del tiempo. Estar más bronceado no implica que ya no se necesite protección, sino lo contrario. La piel bronceada ya sufrió daño, y debemos seguir cuidándola.
  • Los niños menores de un año NO deben exponerse al Sol de forma deliberada. Para exposiciones cortas, se puede colocar un protector solar especial para niños, a partir de los 6 meses.


¿De qué otras formas me puedo proteger?

  • Se pueden tomar descansos del Sol, utilizando una buena sombra. Se debe estar bien cubierto, ya que hasta un 50% de la radiación del Sol puede traspasar telas finas y cualquier otro material sutil.
  • La ropa es uno de los mejores aliados en protección solar. Es aconsejable usar prendas con manga larga, pantalones largos y sombreros con ala ancha (más de 10 cm). La ropa blanca es más fresca pero protege menos, mientras que la negra es más calurosa, pero nos cubre más de los efectos del Sol.
  • Las nubes y el agua no filtran la radiación. Si el día está nublado o se ingresa al mar o a la pileta, de igual forma, se debe cuidar del Sol.


¿Qué debo hacer si me quemé?
Ante enrojecimiento leve, se debe utilizar algún producto post solar en gran cantidad para hidratar y curar la piel. Es muy importante hidratarse con agua y jugos naturales. Debemos esperar a que la piel esté recuperada para volver a exponer la piel al Sol. Si la lesión es más seria, hay que consultar con un especialista.

Es importante recordar que, al menos una vez al año, se debe controlar con un dermatólogo los lunares y manchas del cuerpo.

Si notás algún lunar, mancha o lesión nueva diferente al resto o que cambia, o una “herida” que no cura luego de un mes, debemos consultar cuanto antes con un especialista. El servicio de Dermatología del Hospital Alemán cuenta con agendas de contingencia para reservar un turno programado, y seguirá atendiendo de forma ininterrumpida durante todo el verano.

 

Si necesitás reservar un turno, podés hacerlo de las siguientes formas:

Consulta Presencial
Llamá a la línea exclusiva del Plan Médico del Alemán, 4827-7070 (opción turnos), y un operador te asistirá.

Videoconsulta
A través de la APP o el Portal Plan Médico.